JAPON

Hemos experimentado un Japón, con una continua yuxtaposición de extremos, pasando de la modernidad de Tokio a la tradición de Kyoto. Del más absoluto respeto en las formas al ser más indecente (no en vano en el metro hay vagones exclusivos para mujeres). De lo más clásico en el vestir (es difícil encontar un japonés con las zapatos sucios y un traje que no sea de color oscuro), a la ruptura de los jóvenes con formas de vestir "rompedoras", basadas en el manga y el anime, las lolitas, góticas... Además del culto a lo breve: fugaz, aunque intenso, es un bocado de sushi, un combate de sumo, la aparición de una geisha en la noche, con sus pasos cortos y rápidos; también cultivan la pasimonia de las cuatro horas que puede durar una ceremonia del té.

El cruce de Shibuya el más famoso y transitado del mundo (Tokio).

Lonja de pescado de Tsukiji la más grande del mundo ( Tokio).

Luchador de sumo, posiblemente el más opulento del mundo :-)

Apunto de merendarse a su aponente, en el estadio de Ryogoku Kokugikan (Tokio).

Geisha en la calle Hanamik-Koji, del famoso barrio de Gion (Kyoto).

Maiko regalandonos una sonrisa en el distrito de Gion (Kyoto).

De todos los templos que hemos visitado estos cuatro nos parecen los más interesantes:

Templo Sanjusangen-do (Kyoto),en la celebración de la fiesta Toshi-ya Matsari.

Interior del templo con las mil y una estatuas de Kannon (la diosa budista de la misericordia).

Seguimos con los records, el templo Todaiji daibutsuden (Nara), es el edificio de madera más grande del mundo.

El buda de bronce que alberga en su interior mide 16m, pesa 437 toneladas y contiene 130 kg de oro.

Toriis que conducen al santuario de Fushimi-Inari Taisha (Kyoto).

Templo de Kinkaku-ji, con un recubrimiento de pan de oro.

Sobre este templo recomiendo la lectura del libro, El pabellón de oro, escrito por Yukio Mishima, basado en el hecho real del incendio de este famoso templo budista por un joven novicio.

Un abrazo muy fuerte para todos, próximo destino Beijing (China).